¡Oh, piadoso Niño Jesús de Praga!
Yo conozco los prodigios que has obrado,
tus obras milagrosas para los necesitados,
y los favores que has otorgado
a todo el que te lo ha solicitado.
En vista de tus innumerables gracias concedidas
a través de la veneración de tu Santa Niñez,
particularmente a través de la estatua de Praga,
yo exclamo con las más grande seguridad:
¡Oh muy amado Niño Jesús!
¡Salvador mío!
¡no me abandones!
socórreme en este trance angustioso,
en este caso difícil y desesperado:
en este caso difícil y desesperado:
(hacer la petición)
Tú puedes ayudarme si lo deseas.
Extiende tu mano sagrada y, por Tu poder,
quítame todo lo que me aflige.
A cambio yo te prometo
difundir tu devoción,
agradar más a Dios
y hacer mayor bien a las personas que me rodean.
Amén.
Rezar el Credo, tres Padrenuestros y tres Glorias.
Repetir la oración y los rezos tres días seguidos.
Repetir la oración y los rezos tres días seguidos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario