Poderosísimo
Arcángel San Miguel,
yo te invoco en el
nombre de la Santísima Trinidad,
para que envíes a
tus Santos Ángeles
a todos los
rincones de esta casa,
de manera que por
la virtud y poder
de nuestro Señor
Jesucristo,
sea limpiado cada
uno de sus lugares,
de arriba a abajo, por dentro y por
fuera.