Corderito Manso que en altar
estás,
vence a mis enemigos que contra
mi estén,
que mi corazón encarne en el de
él,
como encarnó Jesucristo,
y mandó, y la muerte de San Lázaro venció,
Con dos te miro,
con tres te agarro,
con la Sangre de Jesucristo el
corazón le parto.
A mi enemigo veo venir con ojos vendados
A mi enemigo veo venir con ojos vendados
y los brazos inutilizados,
Sangre de Jesucristo me pide
y yo no se la he de dar,
yo te pido gran Señor que me lo
traigas,
que me lo has de traer rendido a
mis pies,
vencido y desanimado:
Tú tienes la fuerza para vencerlo.
Si algo del diablo intentan
contra mí,
no se lo permitirás,
si a la justicia fuere, no
ganará,
si a defensores pusiere, todos se
negaran.
Como el Cordero de Dios, Jesucristo,
mansos estarán ante mí,
al mirar mi presencia todos se
desmayarán.
Amén. Jesús.+
Rezar el Credo, Padrenuestro y Gloria.
Repetir todo cinco días seguidos.
Repetir todo cinco días seguidos.
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